Hoy día 19 de octubre se celebra el Día Mundial contra el Cáncer de Mama y, por este motivo, el CFCFE quiere adherirse al mensaje de la AECC (Asociación Española contra el Cáncer) y de FECMA (Federación Española de Cáncer de Mama), para concienciar a todas las mujeres sobre el diagnóstico precoz, como principal herramienta para disminuir notablemente las posibilidades de padecer esta enfermedad. Según la OMS, cada 30 segundos, en algún lugar del mundo se diagnostica un cáncer de mama.

Desde el Consejo General de Colegios de Fisioterapeutas de España se quiere destacar que la intervención del fisioterapeuta es clave en pacientes operadas de cáncer de mama, siendo el tratamiento del linfedema, las cicatrices retráctiles y la limitación de la movilidad en el miembro superior del lado afecto, los principales síntomas en mujeres intervenidas de masteotomía.

La Fisioterapia es una disciplina omnipresente para ayudar a todas las mujeres afectadas por cáncer de mama, tanto en el aspecto físico como en el emocional, a la hora de recuperarse y volver a tener una vida lo más normalizada posible.

La labor del fisioterapeuta favorece una óptima cicatrización y un aumento de la flexibilización del tejido dañado durante la quimioterapia y radioterapia. Los ejercicios específicos sirven para  mejorar el tono y amplitud muscular y el drenaje linfático manual es una técnica indispensable para el tratamiento de una de las secuelas más importantes en las masteotomías, como es el linfedema, una acumulación anormal del líquido en el tejido blanco, debido a una obstrucción en el sistema linfático.